CEBOLLA FRITA
La cebolla siempre ha sido uno de mis ingredientes favoritos. Es un plus en la textura y el sabor en los platos que la contienen.
Podemos cocinarla como cebolla caramelizada, que nos servirá para elaborar por ejemplo croquetas o pescados, incluirla en nuestras ensaladas para potenciar su sabor, o entre cucharadas de un rica crema o puré a modo de topping por ejemplo.
No se tardan más de 10 minutos en cocinarla, únicamente ten paciencia para dejarla enfriar!
CATEGORÍA/S:
Dificultad
1/5
- TIEMPO TOTAL: 15 minutos
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PREPARACIÓN
- Pelamos y picamos la cebolla en trocos muy pequeños.
- La introducimos en una bolsa hermética de plástico y le agregamos la harina.
- Cerramos la bolsa y para impreganar bien la cebolla de harina la agitamos enérgicamente.
- Ponemos el aceite a calentar a fuego medio en una sartén amplia.
- Cuando el aceite esté muy caliente, añadimos la cebolla con cuidado.
- Removemos un poco y dejamos unos segundos para que la cebolla se dore.
- Cuando ya esté doradita, la extendemos sobre un plato amplio cubierto de papel de cocina para que recoja el exceso de aceite y echamos un poco de sal por encima.
- Dejaremos que la cebolla se seque para que quede bien crujiente y…
…ya tenemos listo nuestro topping!
CONSEJOS
- Como la cebolla frita es un comodín estupendo, yo suelo aprovechar y hacer mucha cantidad ya que puede guardarse perfectamente 2 o 3 semanas una vez seca.
INGREDIENTES
- 2 cebollas blancas grandes
- 2 cucharadas de harina de trigo
- sal
- aceite de girasol
