CROQUETAS DE BACALAO CON CEBOLLA CARAMELIZADA Y ACEITUNAS

Esta es sin lugar a dudas la reina de las croquetas en casa.

El bacalao nos encanta, si va en bechamel con la melosa cebolla caramelizada y el punto salado de las aceitunas…¡exito asegurado!

Sigue leyendo y ¡anímate a cocinarlas!

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Dificultad

 2.5/5

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PREPARACIÓN

Primero nos hacemos con la cebolla caramelizada (en casa solemos hacer cantidades grandes y congelamos en tarritos pequeños, asi que solo tuvimos que sacarla unas horas antes del congelador).

Desalamos el bacalao (24 horas antes guardado en agua fria en el frigorífico y cambiando el agua 3-4 veces)

Ponemos a calentar la leche n el microondas o en un cazo.
Mientras, en una cazuela o sartén calentamos el Aove y sofreímos el ajo.
Despues añadimos las migas de bacalao desmenuzadas y previamente muy escurridas.
Cocinamos a fuego medio varios minutos con una pizca de sal.

Cuando estén hechas reservamos a parte y, el liquido sobrante de haberlo cocinado, lo añadimos a la leche.

En la misma cazuela donde hemos hecho el bacalao colocamos la mantequilla y una vez derretida añadimos la harina y la tostamos bien.

Una vez vaya cogiendo consistencia, añadimos la cebolla caramelizada y removemos bien.
Seguido el bacalao, removemos y seguimos echando más leche.
Despues las aceitunas picadas y removemos de nuevo.
Antes de terminar de echar toda la leche añadimos una pizca de pimienta negra recién molida y rectificamos de sal.

La bechamel se hace con PACIENCIA y amor: un chorrito de leche, mover las varillas a continuación y volver a echar leche cuando ésta se haya consumido y así hasta dar con la textura adecuada.

Para que os hagais una idea, yo emplee 20 minutos en echar poco a poco los 350ml de leche.

Cuando tenga una consistencia que al darle vueltas se despegue fácilmente de los bordes de la cazuela o la cuchara haga un camino que nos permita ver en fondo, estará lista.
Removemos y retiramos del fuego.
Vertemos la masa sobre una bandeja para que se enfríe.
Cuando se haya templado taparemos con film y la guardaremos en la nevera varias horas para que tome la consistencia necesaria y así podamos manejarla bien.

Si la bechamel está bien hecha nos dejará cortarla y disponerla facilmente sobre una superficie espolvoreada de pan rallado.
Yo lo que hago es cortar la masa en tiras largas y corto después las porciones.
Luego cojemos las porciones con la mano y damos forma (en redondo, cuadrado, de forma tradicional…)
Pasamos por huevo y pan rallado.

Ponemos abundante aceite de girasol en una sartén.
Cuando esté caliente el aceite, añadimos las croquetas de pocas en pocas, hasta que se doren.

Puedes usar la tradicional leche (recuerda, siempre caliente) o cualquier bebida vegetal (de arroz, de avena..)
Puedes sustituir la harina integral por la misma cantidad de harina normal o de garbanzo.
Se pueden congelar, pero habremos de sacarlas previamente de la nevera unos minutos antes sin que lleguen a descongelarse. Y al freirlas, el aceite no deberá estar excesivamente caliente, porque se quedarán congeladas por dentro sino.
Haz click en este enlace para saber los TRUCOS PARA UNA BUENA BECHAMEL